#Mit #Oceanos #Ocean #Robot #Tecnologia #Medioambiente #EnergiasRenovables #Robotic #Sofi
En medio del cambio climático y los excesos en la pesca, investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) desarrollaron un «replicante acuático» capaz de pasar desapercibido por sus «congéneres» de escamas y espinas.
Sus movimientos son mímica pura. Se mueve lento, sobre el arrecife, por sobre los corales. A lo lejos engañaría al ojo más experto. Pero sus entrañas no son de carne y espinas, sino de impulsos y circuitos electrónicos. Y su cola flexible, que oscila hacia adelante y hacia atrás, no está hecha de músculo y escamas, sino de elastómero, un polímero con propiedades elásticas.
Como una especie de «replicante del futuro», investigadores del MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts) desarrollaron un pez robot, una máquina hipnótica, que el mar nunca antes había visto. En un documento publicado por Science Robotics, los científicos presentaron a SoFi (Soft Robotic Fish) que, en medio del cambio climático y los excesos en la pesca, podría ayudar a salvar la vida acuática.
SoFi fue diseñado para resolver varios problemas que entorpecen la robótica oceánica y para actuar como ojos y oídos discretos de los biólogos marinos.
Innovación N°1
El primer problema a resolver fue la comunicación. Los vehículos robotizados submarinos suelen estar amarrados a un bote porque las ondas de radio no funcionan bien bajo el agua. SoFi se comunica mediante el sonido.
«La comunicación de radiofrecuencia bajo el agua solo funciona por unos pocos centímetros», detalló Robert Katzschmann, autor principal del artículo, el experto en robótica del MIT CSAIL (por sus siglas en inglés: Computer Science and Artificial Intelligence Laboratory). «Las señales acústicas en el agua pueden viajar durante mucho más tiempo y con mucho menos consumo de energía». Usando el sonido, los buzos pueden pilotear el pez robot desde más de 20 metros de distancia.
Innovación N°2
Otro problema a abordar fue el de los motores eléctricos de robot clásicos conocidos como actuadores, que pueden ser torpes y el movimiento que producen suele ser intermitente. SoFi pertenece a una clase floreciente de «robots blandos», que usan aire (o aceite) para moverse.
La cola de SoFi contiene dos cámaras huecas que una bomba inyecta con agua. «Todo lo que hace es hacer una especie de ciclo moviendo el agua hacia atrás y hacia adelante», dice Katzschmann, «y eso causa la ondulación de la cola blanda». Ese movimiento natural hace que un robot pueda nadar con los peces sin asustarlos (Los robots con propulsión a chorro suelen dar un “ataque de pánico” generalizado en los arrecifes).
Innovación N°3
El tercer problema a enfrentar fue el nado porque “cuesta” mucha energía. Los peces necesitan mantenerse firmes a ciertas profundidades, pero corregir constantemente nadando hacia arriba o hacia abajo es ineficiente. Así que los peces desarrollaron un órgano lleno de gas llamado vejiga natatoria, lo que les permite lograr una flotabilidad neutra. (Los tiburones, por ejemplo, tienen hígados masivos que les dan flotabilidad).
SoFi usa su propia vejiga natatoria, un cilindro que comprime y descomprime el aire con un pistón y le permite alcanzar profundidades de casi 20 metros controlando mejor su presión interna.
SoFi, inspirada en el atún, las medusas y las langostas, nada desapercibida por su entorno.
Conclusión
Lo que los investigadores han logrado es dar con un robot realmente “escamoso” con una forma y función novedosas. En sus estudios iniciales, descubrieron que los peces, curiosos, nadaban junto a su robot. «Nada los distraía, salvo cuando nosotros nos acercábamos, como buzos, allí nadaban y se alejaban rápidamente”, dice Katzschmann.
Por el momento, SoFi está controlad@ de manera remota. Pero la idea es que las futuras versiones inlcuyan visión artifical para detectar peces específicos y seguirlos «sin levantar sospechas». Eso podría ayudar a estudiar la dinámica o monitorear la salud de las poblaciones de peces en océanos cada vez más contaminados. Desde TN Tecno te decimos: «Bienvenid@ SoFi!»
FUENTE: TN TECNO